El Papa Benedicto XVI envió un telegrama de pésame al Arzobispo de Monterrey, Mons. Francisco Robles Ortega, en el que expresa sentirse "profundamente apenado por el fallecimiento del querido" Arzobispo Emérito de esa Arquidiócesis, Cardenal Adolfo Antonio Suárez Rivera.
En el texto, el Pontífice manifestó su "más sentido pésame al Pastor y a los Obispos auxiliares, así como al clero y fieles de esa Iglesia particular y a los familiares del difunto Purpurado" y elevó sus "oraciones de sufragio, para que el Señor conceda su paz a quien ha servido tan intensa y generosamente a la Iglesia durante su ministerio pastoral".
"En estos momentos de dolor humano, que el misterio Pascual de Cristo ilumine y llene de esperanza", a todos "cuantos lloran tan sensible pérdida", indicó el Santo Padre, luego de lo que impartió una especial bendición apostólica.