El Papa Benedicto XVI deploró enérgicamente el asesinato del joven Ministro de Industria libanés, el cristiano Pierre Gemayel, de 34 años de edad, y pidió la participación de todos los libaneses en la construcción de un país más fraternal.
En el mensaje que dirigió con ocasión de los funerales de Gemayel, leído en la Catedral de San Jorge de Beirut, el Pontífice consideró que “estamos todos duramente afectados por un acto incalificable, y le pido al Señor acoger en la morada de su reino a quien se había comprometido en la vida pública por el servicio de su país, y de sus hermanos libaneses”.
En el texto, el Papa expresó su deseo de “que todos los libaneses sean particularmente solidarios en estas circunstancias, y que se comprometan de ahora en adelante de manera renovada a la construcción de un Líbano autónomo y siempre más fraternal, teniendo cuidado de garantizar una participación activa de todas sus componentes en la sociedad nacional”.