Santa Sede pide soluciones justas y no solo pragmáticas ante desafíos demográficos

El Observador permanente de la Santa Sede ante las Naciones Unidas (ONU), Arzobispo Celestino Migliore, sostuvo que frente al aumento de la relación de dependencia en algunas zonas donde el crecimiento de la población anciana significará una carga más pesada sobre la población activa, los estados fomenten “el respeto por la vida en todos sus estadios” y encuentren “soluciones apropiadas y justas y no meramente pragmáticas".

Mons. Migliore intervino el pasado martes 10 de abril, en la 40º sesión de esta Comisión sobre Población y Desarrollo de que discute del tema "Los cambios estructurales en la edad de las poblaciones y sus implicaciones para el desarrollo".

"Los informes recibidos por la Comisión este año –señaló– apuntan a que la relación de dependencia aumente en algunas zonas donde la población anciana en aumento supondrá una carga más pesada para la población activa". El Nuncio auspició que los estados afrontasen esta situación "fomentando el respeto por la vida en todos sus estadios y encontrando soluciones apropiadas y justas y no meramente pragmáticas" y sugirió como instrumento valioso "la solidaridad intergeneracional".

África: Invertir en educación

Al analizar la situación de África, que hacia 2050 tendrá la relación de dependencia más baja del mundo, el Prelado afirmó que este hecho dará al continente "una ventaja sin precedentes en términos económicos ya que contará con una fuerza de trabajo joven y numerosa".

Para ayudar a que África no pierda esta oportunidad de desarrollo, las naciones deberían "invertir en su capital humano y sus infraestructuras para sostener el crecimiento económico"; y "como mucha de esta futura fuerza de trabajo ya ha nacido y está en edad de escolarización" la delegación de la Santa Sede "cree que la inversión más decisiva es la educación".

Esta inversión, según cálculos de la ONU, supondría nueve mil millones de dólares estimados en el valor del dólar en 1998. "No se puede considerar un precio muy alto para un objetivo de esa envergadura", dijo el Arzobispo y recordó que la educación, sobre todo la de las niñas y jóvenes", puede tener un impacto notable en el aumento de la población. Cuando las mujeres son más cultas se las respeta más, ganan dinero y tienen mayor voz en los asuntos familiares".