15 de marzo de 2010 / 02:51 AM
El Observador Permanente de la Santa Sede ante la ONU, Mons. Silvano Tomasi, pidió en la 13º sesión del consejo de derechos humanos de esta entidad, se respete y promueva la igualdad religiosa, así como un alto a la injusticia en los países donde las minorías son maltratadas por su fe.
El pronunciamiento se llevó a cabo en la ONU en Ginebra el 12 de marzo. El Prelado comenzó haciendo referencia a al diálogo interreligioso entre católicos y musulmanes con la participación del Pontificio Consejo para estos asuntos, realizado tres semanas atrás en Egipto, donde se pidió evitar "la manipulación de la religión por razones políticas u otros fines ya que conlleva a la violencia" y también se recomendó "evitar la discriminación sobre todo con bases en la identidad religiosa".
Mons. Tomasi mencionó luego, refiriéndose a la falta de libertad religiosa que casi el 70 por ciento de la población total (6 mil 8 cientos millones de habitantes) vive en algunos países; en muchos casos donde sus derechos son violados y su liberad de culto es afectada.