8 de julio de 2008 / 09:26 AM
El Pontificio Consejo para la Unidad de los Cristianos lamentó “con amargura” y calificó de “un desgarro en la tradición apostólica” la decisión del Sínodo General de la iglesia Anglicana que ayer autorizó la ordenación de mujeres obispos.
"Hemos sabido, con amargura, la noticia del voto de la Iglesia de Inglaterra que abre el camino a la introducción de la legislación que conduce a la ordenación de las mujeres al Episcopado", sostiene un comunicado del dicasterio difundido hoy.
El texto recuerda que "la posición católica, en este sentido, fue expresada claramente por el Papa Pablo VI y por el Papa Juan Pablo II. Una decisión así, significa un desgarro en la tradición apostólica mantenida por todas las Iglesias del primer milenio y, por lo tanto, un obstáculo ulterior a la reconciliación entre la Iglesia Católica y la Iglesia de Inglaterra".