Tras la noticia de la muerte del líder palestino Yasser Arafat en un hospital de París, el director de la Oficina de Prensa vaticana, Joaquín Navarro-Valls, manifestó el dolor de la Santa Sede y el deseo de que Dios conceda la paz a Tierra Santa, “con dos estados independientes y soberanos, plenamente reconciliados entre sí”.
"La Santa Sede se une al dolor del pueblo palestino por la desaparición del presidente Yasser Arafat. Fue un líder de gran carisma, que amó a su pueblo e intentó guiarlo hacia la independencia nacional”, manifestó Navarro-Valls en un comunicado.
“¡Que Dios acoja en su misericordia el alma del ilustre difunto y conceda la paz a Tierra Santa, con dos estados independientes y soberanos, plenamente reconciliados entre sí!", concluyó.