El Obispo de Avellaneda–Lanús, Mons. Rubén Oscar Frassia, aseguró que "nuestra vida, y la vida de la Gracia, es un don pero es una conquista nuestra, es una Gracia pero también es un trabajo nuestro, es un amor gratuito, pero también crea responsabilidad", por eso "la salvación no es mágica" sino que "reclama siempre una respuesta responsable de cada uno y esa respuesta es una conquista".
Tras afirmar que "nuestra vida en el Señor es fácil, pero complicada en el desarrollo cotidiano", Mons. Frassia señaló que el querer ser auténticos cristianos implica "sufrir las contrariedades, las contradicciones, los embates, las persecuciones, las incomprensiones y tantas otras cosas" pero "¡No hay que asustarse!" pues "si le pasó al Maestro ¿por qué no nos va a pasar a nosotros?".
Luego recordó que cuando "uno se calla la boca, por respeto, o por amor, o por misericordia, o por comprensión, frente a aquellas agresiones tan soeces, tan mentirosas y hasta calumniosas que tiene que sufrir por el Reino y por el Señor"; entonces el Espíritu Santo "nos mueve a dar testimonio, nos mueve para liberarnos, nos mueve para la cultura, para los comportamientos, para las acciones, para la vida social, familiar, eclesial".