Decenas de sacerdotes y religiosos de la diáspora cubana en el mundo concluyeron su Encuentro XXXI en Cayo Hueso (Florida) con un enérgico documento en el que denuncian la grave decadencia del valor de la sexualidad humana, y expresan su solidaridad con la pastoral de la Iglesia en Cuba.
“Ante el reto que representa la cultura de la muerte que conlleva a la pérdida de los valores cristianos sobre la ética y sacralidad de la vida, el respeto al cuerpo, la relativización del sexo, la disgregación moral del matrimonio y la familia, nosotros como pastores, enfatizamos el auténtico significado de nuestras relaciones de amor, en sus diferentes expresiones que, como reflejo del amor de Dios, tiene que ser libre, total, fiel y fructífero”, señala el documento.
Los participantes de la reunión de la Diáspora cubana señalan además que al inicio del novenario de años de preparación a la celebración del cuarto centenario de la aparición de Nuestra Señora de la Caridad en las aguas de Nipe “recordamos la petición que en 1915 hicieran nuestros mambises, veteranos de la Independencia, al Papa Benedicto XV para que la declararse patrona de Cuba".