28 de enero de 2011 / 06:01 AM
En la homilía de la Misa de clausura de la reunión del Consejo Permanente de la Conferencia Episcopal Italiana (CEI), el Cardenal Angelo Bagnasco, señaló que en el cumplimiento de su misión los sacerdotes no deben temer a las críticas, a ejemplo del Papa Benedicto XVI.
En la Catedral de Ancona donde concluyó este 27 de enero la reunión de la CEI, el Arzobispo de Génova y Presidente de la CEI señaló que "si la cultura nihilista tiende a cancelar la interioridad de las personas, los sacerdotes deben ayudar a los fieles a redescubrirla. Y en esta misión no pueden tener miedo a las incomprensiones ni a las críticas".
"El ejemplo a seguir es el de Benedicto XVI, que nos enseña la humildad en el trato, la claridad de la verdad, la sabiduría lúcida del diálogo, la prudencia de los gestos, la libertad ante el mundo y el coraje que deriva de saber que se está en manos de Dios".