Un sacerdote que servía en Camerún murió por disparos de militares, cuando el país africano se encuentra en medio de un conflicto armado que lleva ya algunos años.
El P. Cosmas Ombato Ondari falleció el 21 de noviembre en Mamfe, una ciudad ubicada en el suroeste del país.
El sacerdote era miembro de los misioneros Mill Hill y servía en Camerún desde marzo de 2017, cuando fue ordenado.
Este sacerdote es el segundo en ser asesinado en Camerún en los últimos meses. El P. Alexander Sob Nougi murió el pasado 20 de julio en la Diócesis de Buea, también en el suroeste del país.
Asimismo, en octubre un seminarista de 19 años fue asesinado en medio del conflicto en el suroeste, originado por el deseo de algunos grupos de separar las regiones donde se habla inglés de aquellas donde se habla francés.
El conflicto ha dejado varios cientos de muertos y provocado que 300 mil personas huyan como refugiadas a Nigeria. Además, en Camerún hay alrededor de 80 mil desplazados internos.
De otro lado, en junio de 2017, Mons. Jean Marie Benoit Balla, Obispo de Bafia, fue encontrado muerto en el río Sanaga luego que se denunciara su desaparición. Los obispos de la Conferencia Episcopal alertaron que el Prelado "no se suicidó; fue brutalmente asesinado".
La Conferencia Episcopal de Camerún señaló en un comunicado que “Mons. Jean Marie Benoit Balla no se suicidó, sino que fue brutalmente asesinado”.
En un hecho que aún no ha sido aclarado, un sacerdote murió en Camerún durante un enfrentamiento entre militares y un grupo de separatistas el pasado 20 de julio.
