18 de noviembre de 2009 / 10:38 PM
El P. Luigi Squarcia, Párroco de Acquapendente, quien se encuentra desde hace cuatro años enfermo de esclerosis lateral amiotrófica, una enfermedad que va paralizando poco a poco el cuerpo hasta producir la muerte, se encontró esta mañana con el Papa Benedicto XVI a quien ofreció sus "sufrimientos por el bien de la Iglesia".
Tras el encuentro con el Santo Padre en una pequeña sala del Aula Pablo VI, el sacerdote comentó que "vine para ofrecerle al Papa mis sufrimientos por el bien de la Iglesia. Estoy aquí enfermo, por primera vez, luego de que por años había acompañado a mis parroquianos y a mis muchachos de la escuela acá".
Ahora, explica con serenidad a L’Osservatore Romano, ya no puedo "mover ni los brazos ni las piernas, y sé que perderé el habla y luego la posibilidad de respirar". El P. Squarcia relata además que "ahora vienen a confesarse más personas que cuando podía moverme".