Retiran de diócesis a religioso que había cumplido condena por abusos

El religioso agustino P. Celso García ha sido apartado de nuevo de la actividad pública después de ser reinsertado como párroco de varias localidades de Diócesis de Sigüenza-Guadalajara (España) tras cumplir condena por abusos a menores entre el año 2012 y 2015.

El Obispado de Sigüenza-Guadalajara envió un comunicado ante las informaciones publicadas sobre el P. Celso García en donde explica que éste fue acusado en el año 2010 de "conductas inapropiadas con menores" tras ser denunciado por tres menores de 11 y 12 años de la Escolanía del monasterio de El Escorial, Madrid, donde era profesor.

En el año 2012 el P. Celso García fue condenado a cárcel, cumplió la condena hasta el año 2015 y también se llevó a cabo un "correspondiente proceso canónico, cuya pena también ha cumplido".

Según precisan en el comunicado, el Superior Provincial de la Congregación de los Religiosos Agustinos pidió que se le acogiera en la Diócesis de Sigüenza-Guadalajara ya que la "anciana madre" del P. Celso García residía en esta diócesis.

De esta manera el P. Celso García trabajó "pastoralmente en una zona rural, comprometiéndose firmemente a tener especial cuidado en la relación con los menores".

Desde la Diócesis se aceptó la petición "teniendo en cuenta la dignidad de toda persona, la capacidad de su reinserción pastoral" y el Obispo de la Diócesis , Mons. Atilano Rodríguez, "asumió la responsabilidad de acompañarle durante su estancia" y "de velar paternalmente por su persona, llevándose a cabo un seguimiento minucioso de su actividad para garantizar su recto comportamiento".

En declaraciones a Europa Press, el Vicario General del Diócesis, P. Agustín Bugeda, afirmó que el P. Celso García fue acogido en la diócesis "por razones humanitarias" ya que su madre estaba muy delicada de salud y falleció recientemente y también para "cumplir una terapia".

El P. Bugeda también aseguró que esta acogida temporal fue solicitada por la Congregación de los Agustinos y que ahora será ésta quien "actuará en consecuencia".

También precisan en el comunicado que "en este momento el P. Celso está perfectamente integrado con los hermanos sacerdotes y con los miembros de las comunidades parroquiales que lo han acogido con afecto sincero".

En el comunicado de la diócesis, también se insiste en que "secundando los criterios del Santo Padre sobre los abusos a menores por los miembros de la Iglesia y los actuales protocolos en relación con el tema, la diócesis de Sigüenza-Guadalajara está comprometida en la erradicación de los posibles delitos de pederastia cometidos por sacerdotes o por otros agentes de pastoral".

Además manifiestan "la disponibilidad de escuchar a las posibles víctimas, acompañarlas en todo momento y, por supuesto, a la colaboración con la justicia", así como el "compromiso de luchar decididamente para evitar que sucedan hechos de esta naturaleza y que no produzcan tan gravísimo daño a todos los que confían en la Iglesia y sus pastores, en su inmensa mayoría ejemplares".