Al término de la Santa Misa en la Solemnidad de Corpus Christi, el Papa Benedicto XVI hizo entrega del Instrumentum Laboris (documento de trabajo) del Sínodo de los Obispos de Medio Oriente a los obispos de esta región. En su discurso el Santo Padre destacó la inestimable tarea de paz y reconciliación de los cristianos en esta región y expresó su esperanza de que se respete siempre todos sus derechos, incluida la libertad religiosa y que nunca sean discriminados.
Antes de entregar uno a uno el Intrumentum Laboris, el Papa recordó al asesinado Obispo Luigi Padovese, quien era Presidente de la Conferencia Episcopal de Turquía. Tras resaltar su gran aporte a los trabajos para el próximo sínodo así como en el diálogo interreligioso, Benedicto XVI señaló que "su muerte es un recordatorio de la vocación que todos los cristianos comparten, para ser valientes testigos en toda circunstancia de lo que es bueno, noble y justo".
El Papa comentó luego que escogió entregar este importante documento en la Solemnidad de Corpus Christi debido al tema de la unidad eclesial que se tratará en el Sínodo de octubre, ya que la Eucaristía es efectivamente el centro de la Iglesia y su unidad.