El Arzobispo de Valencia, Mons. Agustín García Gasco, denunció que "la defensa de los derechos humanos en nuestro planeta está siendo letalmente carcomida por el relativismo, por la arbitrariedad a la hora de reconocer los derechos humanos de los más débiles y desprotegidos".
En su carta semanal titulada "Fortalecer el verdadero humanismo", el Prelado recordó que Juan Pablo II "advirtió que en nuestro mundo se estaba produciendo una guerra de los fuertes contra los débiles: los primeros, sobreprotegidos por todo tipo de recursos e instrumentos; los segundos, privados de sus derechos más elementales, especialmente del derecho a la vida, por el abuso del poder de los primeros".
"Quienes, por ejemplo, dejan desprotegida la vida humana y prenatal, o quienes facilitan la aniquilación de la vida humana enferma o sufriente; o quienes huyen de la memoria de las víctimas de la violencia, de la guerra o del terrorismo; o quienes asumen como un simple dato estadístico aquellos que mueren por las hambrunas crónicas, por la tiranía de las adicciones o por la explotación de sus personas, ¿verdaderamente expresan un compromiso sincero y creíble con todo ser humano y su dignidad?", cuestionó el Arzobispo.