En el encuentro que sostuvo con las representantes de los movimientos católicos que alientan la promoción de la mujer, el Papa Benedicto XVI precisó que "hay que reconocer, afirmar y defender la misma dignidad del hombre y de la mujer", ya que "ambos están llamados a vivir en profunda comunión, en un mutuo reconocimiento y don de sí mismos".
Este esfuerzo, explicó el Papa en su discurso, debe realizarse "trabajando juntos por el bien común con las características complementarias de lo que es masculino y de lo que es femenino".
Seguidamente Benedicto XVI alentó a "ser conscientes de la condiciones desfavorables a las que han sido y siguen siendo sometidas tantas mujeres, examinando en qué medida la conducta y las actitudes de los hombres, a veces su falta de sensibilidad o de responsabilidad, pueden ser la causa".