23 de junio de 2008 / 05:10 PM
El Arzobispo de Lima, Cardenal Juan Luis Cipriani Thorne, aseguró que actualmente los hombres han perdido toda referencia a lo divino, queriendo ocupar su lugar y por tanto ha desaparecido en ellos el sano temor de Dios.
"El que no teme a Dios ocupa el lugar de Dios", es decir "se siente dueño del bien y del mal, de la vida y de la muerte". Que uno se sienta "seguro de sí mismo, no de Jesucristo dentro de mí, hace que se sienta el dueño de la verdad; por tanto, ese egoísmo va alejando el temor de Dios y va creciendo la soberbia y el amor propio", señaló el Purpurado en la Misa dominical.
Además, recordó que cuando las personas tienen "temor de Dios se acercan mucho a Cristo" pues no quieren "ofenderlo, sino conocerlo, ser su amigo y que nos perdone; y, tenemos un temor de respeto, de reverencia, adoración, un temor que me engrandece".