La catequesis del Papa Francisco de esta semana en la Audiencia General en la Plaza de San Pedro trató del relato de las Bodas de Caná, donde según el Pontífice se ve la misión a la que es llamado el cristiano y que está en relación directa con el amor de Dios y el misterio pascual.
"A estas bodas todos somos invitados, porque ¡el vino nuevo nunca puede faltar!", exclamó el Papa.
Este relato de las Bodas de Caná es una "especie de 'puerta de entrada', en la que son grabadas palabras y expresiones que iluminan todo el misterio de Cristo y abren el corazón de los discípulos a la fe".