Luego de la bendición de los enfermos con el Santísimo Sacramento y tras un intenso momento de adoración eucarística tras la multitudinaria Misa que presidió en la explanada del Santuario de la Virgen de Fátima, el Papa Benedicto XVI saludó a los presentes en francés, inglés, alemán, italiano, español, polaco y portugués.
En sus palabras en castellano, el Santo Padre hizo votos para que la Madre de Dios sea quien "os lleve con ternura y mano segura hacia Cristo, su Hijo".
En sus palabras en castellano, el Pontífice dijo: "queridos peregrinos de lengua española, que habéis acudido con entusiasmo a este encuentro ante la Virgen de Fátima para compartir con tantos otros devotos vuestra confianza y fervor a nuestra Madre del cielo, la Santísima Virgen María. Que ella os lleve con ternura y mano segura hacia Cristo, su Hijo, y sea así fuente de gozosa esperanza y de firmeza en la fe. Muchas gracias".