El Vicario de Su Santidad para la diócesis de Roma, Cardenal Agostino Vallini, hizo votos para que el Papa Juan Pablo II "nos ayude a ser en todas las circunstancias, testigos de Cristo y anunciadores del amor de Dios en el mundo", en la multitudinaria vigilia de hoy en el Circo Massimo de Roma.
En medio de un ambiente de fiesta en el que en diversos momentos se enlazaron cinco santuarios marianos en todo el mundo y también participaron el Coro de la Diócesis de Roma y la orquesta del conservatorio de Santa Cecilia, el Cardenal dijo que de Juan Pablo II "aprendemos, en primer lugar, el testimonio de la fe: una fe arraigada y fuerte, libre de miedos y de compromisos, coherente hasta el último aliento, forjada por las pruebas, la fatiga y la enfermedad".
Esta fe "se ha difundido en toda la Iglesia, más aún, en todo el mundo; un testimonio acogido en todos los lugares, en sus viajes apostólicos, por millones de hombres y mujeres de todas las razas y culturas".