El Vicario Apostólico de Jolo (Filipinas), Mons. Angelito Lampon, señaló que el clero local, así como los religiosos, están recibiendo la protección de militares a raíz de los asesinatos y secuestros que han sufrido colaboradores eclesiales en los últimos años.
En declaraciones a la agencia católica internacional Ayuda a la Iglesia Necesitada (AIN), el Prelado pidió a las comunidades cristianas orar por la situación que se vive y para que la Iglesia en Jolo "tenga la fuerza y el valor de proseguir su camino".
Mons. Lampon indicó que pese a lo difícil de vivir en medio de una población mayoritariamente musulmana que en muchos casos es hostil, los cristianos saben perdonar y "tender la mano en señal de amistad y reconciliación".