El Arzobispo de Kirkuk (norte de Irak), Mons. Louis Sako, se manifestó en contra de la iniciativa de los obispos de Estados Unidos para detener la posible extinción de cristianos del país, porque "generaría más tensión que alivio en los cristianos".
El Prelado contestó a la intervención de la USCCB que solicitó a la Secretaria de Estado, Condoleezza Rice, dar asilo a los cristianos perseguidos y crear una zona segura para ellos en los llanos de Nínive, dándoles así mayor protección.
En entrevista concedida a la organización Ayuda a la Iglesia que Sufre (AIS), Mons. Sako sugirió que la iniciativa podría dividir a los fieles dado el sentimiento contra Estados Unidos que existe en Irak.