El Arzobispo de Burdeos y Presidente de la Conferencia Episcopal Francesa (CEF), Cardenal Jean Pierre Ricard, señaló algunos de los principales desafíos de cara a las próximas elecciones en el país, entre los que se encuentran la defensa de la vida y la familia y el asunto de la inmigración, al inaugurar la Asamblea Plenaria de los obispos franceses que se celebra en Lourdes del 27 al 30 de marzo
El Purpurado afirmó en su discurso que “los católicos, cuando toman una decisión política, tienen que ser consistentes con sus creencias cristianas”, entre las que mencionó a la familia, “la célula básica de la comunidad humana, que en el presente necesita ser custodiada más que nunca”. “Estamos a favor de la familia basada en el matrimonio de un hombre y una mujer, abiertos a la procreación, y al derecho de los niños a tener un padre y una madre”, precisó el Cardenal.
Asimismo rechazó “el pretendido derecho a la muerte, que significaría la legalización de la eutanasia. La dignidad de la vida ha de ser reforzada en todo momento y por ello, no se puede admitir de ninguna manera la práctica de la eutanasia”.