"El apego a las riquezas es el inicio de todo tipo de corrupción, por doquier", alertó esta mañana el Papa Francisco en la homilía de la Misa que presidió en la capilla de la Casa Santa Marta.
Según señala Radio Vaticano, el Santo Padre dijo que "el apego a las riquezas es el inicio de todo tipo de corrupción, por doquier: corrupción personal, corrupción en los negocios, también la pequeña corrupción comercial, la de aquellos que quitan 50 gramos al peso justo, corrupción política, corrupción en la educación… ¿Por qué? Porque aquellos que viven apegados al propio poder, a las propias riquezas, creen que están en el paraíso. Están cerrados, no tienen horizonte, no tienen esperanza. Y al final, deberán dejar todo".
Así lo indicó el Papa comentando el pasaje del joven rico que le pide a Jesús seguirlo y le asegura que quiere vivir desde siempre los mandamientos, pero después cambia totalmente su humor y actitud cuando el Maestro le dice que el último paso que debe cumplir, eso que le falta es vender sus bienes, darlos a los pobres y entonces seguirlo. De golpe, "la alegría y la esperanza" desaparecen en aquel joven, porque él, no quiere renunciar a su riqueza.