Rompiendo la tradición de las Jornadas Mundiales de la Juventud, los peregrinos participantes de la JMJ que se realiza en Río de Janeiro no dormirán en el lugar en el que celebrarán la Vigilia y la Misa final del evento.
Así lo indicó el director de la Sala de Prensa del Vaticano, Padre Federico Lombardi, precisando que esta tradición no podrá ser posible, luego que la organización cambiara la sede de estos eventos finales del Campus Fidei de Guaratiba a la playa de Copacabana.
Esto debido a que el campo de Guaratiba está inundado por las lluvias de estos días y para evitar exponer a los jóvenes al agua y al frío intenso que ha llegado a la sensación térmica de 10 grados en algunos momentos del día.