"Queremos la paz porque la guerra y la venganza no tienen futuro. Pero la paz es un don de Dios, es un don para todos nosotros, para la convivencia, el respeto, los valores humanos y los derechos hombre. Queremos una nueva posición, un cambio de mentalidad pero también de comportamiento", indicó.
En ese sentido, destacó el pedido del Papa Francisco para que Dios convierta el corazón de los violentos. "Esto es muy importante. Debemos rezar por estas personas que están ciegas, que no ven. Que el Señor ilumine a todos para que puedan convertirse al bien, a la paz, a la convivencia y al respeto. Queremos un milagro", expresó.
Finalmente, el Patriarca católico caldeo dijo que ha enviado un mensaje a los fieles musulmanes con motivo de la fiesta de Eid al-Fitr, con la que finaliza el Ramadán.
En el texto, Mons. Sako recuerda que "el ayuno es un momento fuerte para la conversión, para hacer una valoración de la situación también a la luz estos ataques, pero también de la victoria del ejército iraquí que ha liberado Faluya y Ramadi".