30 de junio de 2004 / 09:11 AM
Con el fin de combatir los numerosos casos de desnutrición en la diócesis, las parroquias de La Salette y San Juan Bautista alimentan diariamente a unos mil 500 niños que asisten a los nueve comedores ubicados en diversos barrios de la ciudad, donde además de almorzar, reciben acompañamiento en sus estudios y talleres de artesanía, tejidos y otras actividades.
El párroco, Padre Santiago Weeks, explicó que los comedores están ubicados en Villa Urkupiña y Wayra Qhasa, donde la mayoría de los padres son vendedores, lavan ropa o realizan labores que no les permiten estar con sus hijos durante el día.
El sacerdote señaló que a cada comedor asisten más de 100 niños, de los cuales el 15 por ciento sufre de desnutrición.