En marzo de este año, ACI Prensa conversó con Mons. Ángel Rodríguez Luño, miembro de la Pontificia Academia para la Vida (PAV) desde hace más de 30 años y consultor para la Congregación de la Doctrina de la Fe en el Vaticano, quien explicó que en términos económicos, la fecundación in vitro "es todo un negocio".
"Basta con ir a Internet y ver toda la oferta de clínicas, explican lo que cuesta e incluso si no funcionar les devuelven el dinero. Hay todo tipo de publicidad comercial", añadió.
El experto precisó además que la fertilización in vitro "privilegia el deseo legítimo de tener un hijo y no mira los medios que hay que utilizar, obligando a una gran cantidad de embriones a morir o a ser congelados".
Asimismo aseguró que el principal problema ligado a estos tratamientos es que las técnicas mismas "conllevan que para que nazca un niño, tengan que morir muchos hermanos de este niño". "Teniendo en cuenta todos los embriones que están en juego, probablemente, para que nazcan 20, tienen que morir 80", afirmó.