A seis meses del terremoto que sacudió Haití el 12 de enero de 2010, el Nuncio Apostólico en el país, Mons. Bernardito Auza, señaló que todavía "muchos pobres no ven un camino de salida"; por lo que pidió a la comunidad internacional ver que "tenemos aún necesidad de ayuda".
"¡Pareciera que el terremoto fue ayer! No hay nadie que se lleve los escombros, no se puede transitar por ciertas avenidas de la capital. No hay locales para algunas instituciones del mismo gobierno", indicó el Prelado en entrevista a la agencia vaticana Fides.
Mons. Auza señaló que "el problema de la reconstrucción está ligado a la composición de la Comisión formada para esta misión", ya que el gobierno aún no aprueba la cantidad precisa de miembros extranjeros y haitianos que la constituirán.