El Papa Francisco pidió a la Virgen su intercesión "ante el Señor Resucitado" para que conceda a Bulgaria "el impulso necesario para ser tierra de encuentro" antes de rezar el Regina Coeli en la plaza de San Alexander Nevsky de Sofía ante el icono de la Virgen de Nesebar, que significa "puerta del cielo".
En el primer día de su visita apostólica a Bulgaria y Macedonia del Norte, el Santo Padre rezó "a la Santísima Virgen María, Reina del cielo y de la tierra, para que interceda ante el Señor Resucitado, y conceda a esta amada tierra el impulso necesario para ser tierra de encuentro; en la que, más allá de las diferencias culturales, religiosas o étnicas se sigan reconociendo y valorando como hijos y hermanos de un mismo Padre".
"Nuestra invocación se expresa con la antigua oración del Regina Coeli. Lo hacemos aquí, en Sofía, delante del icono de la Virgen de Nesebar, que significa "Puerta del cielo", y que era tan querida por mi predecesor san Juan XXIII, que comenzó a venerarla aquí en Bulgaria y la llevó consigo hasta la muerte", explicó el Papa.