El Papa Francisco recibió este jueves en el Aula Pablo VI a 700 miembros de Cáritas Italia con motivo del 45° aniversario de esta entidad, y los alentó a llevar "la 'caricia' misericordiosa del Señor" a los más necesitados, entre ellos los inmigrantes que esperan de las comunidades cristianas una respuesta a su llamado "discreto y persistente".
En su discurso, Francisco recordó que Cristo pide de sus discípulos "el compromiso de un amor concreto por cada ser humano, con una opción preferencial por los pobres". En ese sentido, dijo que Cáritas enfrenta la difícil tarea de ser estímulo para que "toda la comunidad crezca en la caridad y encuentre caminos siempre nuevos para acercarse a los más pobres, capaz de leer y enfrentarse a las situaciones que oprimen a millones de hermanos, en Italia y en el mundo".
El Pontífice destacó el voluntariado que Cáritas promueve y alentó a trabajar por una legislación en favor del bien común y de la protección de los grupos más vulnerables. "El Señor sale a nuestro encuentro en los rostros y las historias de los hermanos y hermanas más necesitados", afirmó.