16 de diciembre de 2018 / 09:02 AM
El Papa Francisco recibió esta mañana a quienes sirven en el dispensario pediátrico de Roma y en sus palabras a los médicos, los padres y los pequeños que son atendidos allí, explicó que los niños enseñan una importante lección a todos, también a él.
"Trabajar con los niños no es fácil, pero nos enseña mucho. A mí me enseña una cosa: que para entender la realidad de la vida, es necesario abajarse como nos abajamos para besar a un niño. Ellos nos enseñan esto. Los orgullosos, los soberbios no pueden entender la vida porque no son capaces de abajarse", dijo el Santo Padre.
En sus palabras improvisadas en la audiencia que sostuvo en el Aula Pablo VI, el Pontífice explicó que "todos nosotros, los profesionales, los organizadores, las religiosas, todos, damos muchas cosas a los niños pero ellos nos dan este anuncio, esta enseñanza: abájense. Sean humildes y así aprenderán a comprender la vida, a comprender a la gente".