El Papa Francisco visitó por sorpresa la tarde del domingo la Villa Borghese, en Roma (Italia), para participar en el encuentro "Aldea de la Tierra", organizado por el Movimiento de los Focolares; en el que llamó la atención sobre la vida en las ciudades, donde muchas personas viven y mueren como si estuvieran en un desierto.
La "Aldea de la Tierra", promovida junto al Earth Day, se realizó del 22 al 25 de abril bajo el lema "Vivir juntos la ciudad". El último día el tema fue "Roma, ciudad abierta a la fraternidad". En su sitio web, los Focolares indicaron que el centro de los temas fue el cuidado del planeta, la legalidad, el diálogo interreligioso y la solidaridad.
"Me han venido a la mente dos imágenes: el desierto y el bosque", expresó el Papa al iniciar su intervención. "He pensado que todos ustedes toman el desierto para transformarlo en bosque... Van donde hay desierto, donde no hay esperanza, y hacen cosas para transformar ese desierto en bosque".