El Papa Francisco contó hoy que lleva consigo la cruz de un sacerdote iraquí asesinado por los terroristas del llamado Estado Islámico. Lo reveló esta mañana al recibir en audiencia en el Aula Pablo VI a cinco mil jóvenes consagrados con motivo del Año de la Vida Consagrada.
"Antes que nada, se que entre ustedes hay consagrados y consagradas de Irak y de Siria", dijo al inicio de la audiencia, y señaló que "querría comenzar dedicando un pensamiento a nuestros mártires de Irak y de Siria, nuestros mártires de hoy".