25 de enero de 2016 / 02:19 PM
El Papa Francisco presidió este lunes la celebración de las Vísperas por la Solemnidad de la Conversión de San Pablo, donde invitó a seguir trabajando por la unidad de los cristianos, y señaló que así como el Apóstol, que experimentó el perdón de Dios, "también nosotros no podemos no anunciar el amor misericordioso que nos ha conquistado y transformado".
El Pontífice celebró las vísperas en la Basílica de San Pablo Extramuros, donde también estuvieron presentes representantes de otras confesiones cristianas con ocasión de la clausura de la Semana de Oración por la unidad de los cristianos.
En su homilía, Francisco recordó que antes de su conversión, Saulo de Tarso –anterior nombre de Pablo-, se había dedicado a perseguir a los primeros cristianos.