8 de agosto de 2013 / 10:56 AM
El Papa Francisco recordó que "la vida no es un juego, sino algo muy serio que hay que vivir en plenitud", en su encuentro sorpresivo con un grupo de jóvenes peregrinos de Brescia, región al norte de Italia, quienes llegaron el 6 de agosto al Vaticano para conmemorar el 35 aniversario de la muerte del Siervo de Dios Pablo VI, nacido en esa región.
"Nos ha dirigido palabras de ánimo, de vivir la vida no como un juego, porque si la vivimos como un juego la vida se hace triste, sino vivirla de manera seria y en plenitud, porque esta vida es la que da alegría, y ha invitado a los jóvenes a ser responsables", explicó el Padre Alessandro Tuccinardi, guía del grupo, en declaraciones a Radio Vaticana.
"Fue algo inesperado: hacía mucho tiempo que lo queríamos conocer; tuvimos la oportunidad de participar en una audiencia, pero al final se canceló todo. Ahora, hemos pedido a la providencia que nos ayudase a través de medios muy sencillos y comunes. El Papa se enteró y vino a nuestro encuentro", añadió el sacerdote italiano.