Al culminar el rezo del Regina Coeli, ante la multitud congregada en la Plaza de San Pedro, el Papa Francisco expresó su preocupación y su intensa oración por "los acontecimientos que se están sucediendo en Venezuela".

"Los acompaño con viva preocupación, con intensa oración y con la esperanza que se busquen y se encuentren caminos justos y pacíficos para superar el momento de grave dificultad que el País está atravesando", dijo el Santo Padre.

Francisco invitó "al querido pueblo venezolano, de forma particular a los responsables institucionales y políticos, a rechazar con firmeza todo tipo de violencia y a establecer un dialogo basado sobre la verdad, en el mutuo reconocimiento, en la búsqueda del bien común y en el amor por la Nación".

"Pido a los creyentes orar y trabajar por la reconciliación y la paz", exhortó.

El Santo Padre también pidió que nos unamos "en una oración llena de esperanza por Venezuela, poniéndola en las manos de Nuestra Señora de Coromoto".

El Papa Francisco dirigió también su "pensamiento a cuantos han sido golpeados por el terremoto que ha afectado un área del sur-oeste de la China Continental". "Oremos por las víctimas y por cuantos sufren a causa del violento sismo", pidió.