11 de enero de 2013 / 11:29 AM
La pequeña comunidad cristiana en la provincia de Quetta en Pakistán vive en medio de la consternación, el miedo y la tristeza luego que 3 de sus miembros fallecieran ayer en la ola de atentados ocurridos en esa localidad que dejó como saldo final más de 100 muertos y 155 heridos.
Según señala el grupo terrorista Lashkar-e-Jhangvi, el objetivo de los atentados eran las comunidades de chiítas y el grupo étnico de los hazara.
El Pro-Vicario Apostólico de Quetta, Padre Inayat Gill, señaló a la agencia Fides que los cristianos que murieron se encontraban cerca de los lugares de las explosiones. Entre los heridos también hay varios fieles.