Con ocasión de la celebración del Día Mundial de Población, miembros del Comité Nacional Pro-Vida realizaron una manifestación pacífica frente a las instalaciones de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en la capital mexicana, y solicitaron a su representante poner fin a la ingerencia del organismo internacional en proyectos que promueven el aborto y el control demográfico compulsivo en el mundo.
En un comunicado, el Comité Nacional Pro-Vida denunció que "la ONU ha desviado el camino de su misión de salvaguardar la paz mundial y ha propuesto el control natal como solución al problema demográfico".
El grupo de protesta entregó a la Sra. Liliana Valiña, representante interina ante méxico del Alt Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, una carta en la que recuerda que "en la actualidad el género humano continúa enfrentando amenazas ancestrales tales como la guerra, el hambre, la explotación… pero a la vez enfrenta amenazas nuevas como la práctica y legalización del aborto que cobra alrededor de 50 millones de vidas a nivel mundial, lesiona gravemente la vida y la salud de las mujeres que son víctimas de éste, daña a las familias y destruye el tejido social, corrompiendo el ejercicio de la medicina y vulnerando los derechos humanos más elementales".