Acompañado de su hijo y de sus tres nietos, Giuseppe Mangano, un viudo de 71 años de edad, fue ordenado sacerdote en la Catedral de Bologna (Italia).
En declaraciones a TV2000, el P. Mangano relató que "el Señor llama muchas veces. Yo bromeando digo siempre que 'el Señor me llamaba, me agarraba de los pelos pero yo me escapaba'", en referencia a que en su juventud estudió algún tiempo en el seminario.
Visiblemente emocionado, el sacerdote recordó que su esposa "fallecida hace diez años, me alentó para seguir el diaconado, aunque murió antes de que fuera diácono. Ella estaba enferma hace mucho tiempo y cuando ya estaba muriendo me dijo también que podía ser sacerdote, así que me sometí al discernimiento del Arzobispo".