Oración es necesidad más apremiante ante cónclave, dice Cardenal O’Malley

El Arzobispo de Boston (Estados Unidos), Cardenal Sean Patrick O'Malley, señaló que la oración es la necesidad más apremiante de la Iglesia y de todos los católicos ante el inicio de cónclave en el que se elegirá al nuevo Papa.

En entrevista concedida hoy a ACI Prensa el Cardenal, que será uno de los 115 que elegirá al sucesor de Benedicto XVI, señaló que "la necesidad más apremiante en este momento es la oración para que el Espíritu Santo nos ilumine".

"Esto tiene que ser como la novena antes de Pentecostés para que el Espíritu Santo se derrame entre nosotros para que podamos encontrar nuestro nuevo Pedro que podrá confirmar nuestra fe y ayudarnos en encontrar el camino que llega al Padre".

Para el Purpurado estadounidense, lo más importante que deben hacer los fieles católicos en todo el orbe es "rezar con mucha fe y tratar de cumplir con nuestro deber de ser portavoces del Evangelio, tratar de vivir la Nueva Evangelización invitando a otros a seguir a Cristo".

Tras comentar que su reacción al conocer la renuncia de Benedicto XVI fue de incredulidad como el Apóstol Tomás pero que luego se transformó en confianza en la decisión del ahora Papa Emérito, el Cardenal O'Malley dijo que estos días previos al cónclave son "muy importantes porque nos dan una oportunidad de conocernos mejor y compartir información sobre la situación de la Iglesia en distintas partes del mundo".

"También nos permiten hablar del gobierno de la Iglesia y de las características que deberíamos buscar en un posible candidato para el papado. Además están presentes los que tienen más experiencia y una sabiduría que comparten con nosotros que estamos entrando por primera vez en un cónclave".

El Arzobispo de Boston dijo a ACI Prensa que el ambiente espiritual de estos días de las congregaciones generales "es como un retiro spiritual. Esta misma tarde recibimos una conferencia espiritual del Padre Raniero Cantalamessa (predicador de la Casa Pontificia) porque la atmósfera tiene que ser de oración, de reflexión profunda y de una búsqueda de la voluntad de Dios".

Sobre los desafíos de la Iglesia, el Cardenal se refirió a las relaciones con el mundo musulmán, a la persecución que sufren los católicos, el gobierno desde el Vaticano en relación a la Iglesia universal, entre otros.

"Son muchos los desafíos que el nuevo Papa tendrá que enfrentar. Incluso la crisis del abuso sexual es algo que tiene a nuestra gente muy preocupada y el Santo Padre tendrá que tomar cartas en el asunto", explicó.

El Cardenal dijo además que lo llena de esperanza la realización de la próxima Jornada Mundial de la Juventud en Río de Janeiro (Brasil) donde se espera que cuatro millones de personas se encuentren con el nuevo Papa.

"Cristo siempre está con la Iglesia y siempre vamos adelante con la gracia de Dios.

Nuestra fe es causa de alegría y deberíamos estar siempre agradecidos por las bendiciones que estamos recibiendo", aseguró.?