Tras la renuncia del Papa Benedicto XVI al pontificado y su decisión de retirarse a una vida de oración, el Secretario General de la Conferencia Episcopal de Myanmar (Birmania) y Arzobispo de Yangon, Mons. Charles Maung Bo, dijo que está seguro que sus “oraciones seguirán purificando a la Iglesia en los siglos venideros".

“En las aguas turbulentas de la dictadura del relativismo, el Santo Padre ha conducido el arca de la fe con valentía y un celo infatigable”, señaló Mons. Bo a la agencia vaticana Fides, y resaltó que los Obispos de Myanmar siempre recordarán "la preocupación expresada por el Papa durante sus visitas ad limina, la generosidad tras del ciclón Nargis, y las bendiciones impartidas”.

También subrayó el profundo agradecimiento de la Iglesia en su país (al que se le conocía como Burma o Birmania) por los dones recibidos a través de “su profunda fe, así como su inquebrantable compromiso para difundir las enseñanzas, su certeza moral, su misericordia y su valor en medio de tantos desafíos”.

El Obispo de San Cristóbal de Las Casas (México), Mons. Felipe Arizmendi Esquivel, dijo que admira y valora del Papa su “profunda madurez humana y cristiana, su clarividencia evangélica para decidir el momento oportuno, su generosidad espiritual al no estar aferrado a un puesto, su gran libertad para tomar decisiones tan trascendentes, y sobre todo su arraigado y sacrificado amor a la Iglesia”.

El Presidente del Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM) y Arzobispo de Tlalnepantla (México), Mons. Carlos Aguiar Retes, indicó que la “exquisita y delicada bondad (del Papa) la llevaremos en nuestros corazones, confiando que Dios Nuestro Señor lo acompañara en esta etapa final de su vida, dedicada al silencio, la meditación y la oración”.

Mons. Aguiar subrayó que con la decisión del Santo Padre “la Iglesia Católica, se fortalecerá en la fe, en la esperanza y la infinita confianza del amor de Dios”.

La Familia Agustino-Recoleta, a través de su Prior General, Fr. Miguel Miró calificó el gesto del Papa como un gesto que “revelan su profunda vida espiritual y su alta calidad humana”.

El prior recordó las palabras de Benedicto XVI cuando calificó a san Agustín como su “buen compañero de viaje en su vida y en su ministerio” y agradece al Papa por toda su entrega que continuará en su vida de retiro, estudio y oración al servicio de la Iglesia.

El Presidente de la Fraternidad Comunión y Liberación, Padre Julián Carrón expresó en un comunicado que “el gesto del Papa nos recuerda poderosamente que debemos renunciar a cada seguridad humana, confiando exclusivamente en la fuerza del Espíritu Santo”.

El Obispo Auxiliar de Guayaquil (Ecuador), Mons. Guido Ivan Minda Chalá, en el programa Mas que Noticias de EWTN Radio en español, dijo que toda la Iglesia de su país está unida en oración y que están seguros que el Papa “seguirá esforzándose para servir a la iglesia desde la trinchera de la plegaría y la oración como el mismo ha indicado en su mensaje”.