La Conferencia Episcopal Salvadoreña (CES) llamó a buscar soluciones concertadas a los problemas del país para así evitar episodios violentos como el del 5 de julio, en el que dos policías murieron al enfrentarse a tiros con estudiantes que protestaban por el aumento del pasaje del transporte público.
"Los graves problemas económicos y sociales y de convivencia demandan un esfuerzo concertado y generoso para que el país que tanto amamos pueda salir adelante", señala el comunicado de la CES, leído por el Arzobispo de San Salvador, Mons. Fernando Sáenz Lacalle.
El Prelado expresó que como Iglesia "han acompañado con oraciones a las víctimas y familiares". "También hemos orado por la patria que no logra conseguir plenamente el don preciso de la paz, ya que compartimos los sentimientos de la gran mayoría de los salvadoreños que desean vivir en una sociedad sin violencia", indicó.