Obispos mexicanos advierten que Dios se ofende cuando sufre un niño

La Comisión Episcopal de Familia, Juventud y Laicos, llamó a los mexicanos a proteger la integridad y dignidad de los niños, porque basta que uno de ellos sufra para que se cometa "una gran injusticia contra Dios", pues a Él se ofende cuando alguno de estos más pequeños es lastimado.

En un comunicado con ocasión del Día del Niño, se exhortó a los mexicanos a no quedarse "en lamentaciones o tristezas, sino que debemos comprometernos ante Dios a transformar esta realidad que impide la vida y la dignidad de los niños, su integridad en el ambiente de las familias, la Iglesia y la sociedad".

El texto firmado por Mons. Francisco Chavolla Ramos, Responsable de la Dimensión Familia, recordó el valor que el Evangelio da a los niños. "El Señor Jesús, el Hijo de Dios, fue muy severo para con quien lastime a un niño, sea quien sea", señaló.

Además, indicó, "la Iglesia no olvida que Cristo nos ha puesto a los niños como ejemplo, modelo-maestro de sencillez evangélica, que nos abre las puertas del Reino de Dios"; por ello "nos mandó a los adultos darles un espacio prioritario en nuestro trato, respetando en cada niño la inocencia que le hace contemplar el Rostro mismo de Dios".

"En este Evangelio descubrimos que el niño, todo niño, es una Buena Nueva que hemos de acoger, con corazón agradecido, tanto los padres como quienes tenemos la misión de apoyarlos a fin de que cumplan fielmente su responsabilidad y derecho de acogerlos, cuidarlos y educarlos en el amor de una familia", afirmó el comunicado.

El Prelado llamó a la conversión de los corazones para que transformando la familia, la Iglesia y la sociedad, se aseguren "a todos los niños mexicanos un cuidado del que Dios mismo es el garante y custodio".

Mons. Chavolla aseguró finalmente a todos los niños mexicanos que "todos los que formamos la Iglesia Católica, como discípulos y misioneros, lucharemos siempre por promoverlos, apoyarlos y ofrecerles la educación integral que los capacite para una vida digna, íntegra y feliz".