4 de febrero de 2004 / 11:13 AM
La Conferencia Episcopal Argentina (CEA) publicó un documento en el que recuerda que la Constitución protege al no nacido, sostiene que es obligación de todos los argentinos respetar la Carta Magna y demanda al gobierno hacerla cumplir con la implicancia de no permitir la legalización del aborto.
En medio de la polémica por la candidatura a la Corte Suprema de Justicia de Carmen Argibay, que se proclamó atea militante y abortista, los obispos señalaron que “proponer una eventual legalización del aborto contradice el espíritu y la letra de la Constitución y el sentir de la inmensa mayoría de nuestro pueblo que cree en la vida como un don de Dios confiado al cuidado de todos”.
En la declaración, la CEA sostiene que “necesitamos leyes que promuevan la vida” y precisa que “las leyes deben cuidar y defender la vida, el primero de los derechos humanos –inalienable e irrenunciable– y su ‘santuario’ que es la familia”.