Los Obispos de Nigeria expresaron su dolor tras las dos tragedias ocurridas el último domingo en el país: un accidente aéreo en Lagos que causó la muerte de 153 personas y un coche bomba que explotó cerca de una iglesia evangélica, donde murieron otras 15.
El avión de pasajeros se estrelló en el barrio de Lju, a las afueras de Lagos. Chocó contra un edificio de dos pisos y cayó sobre un terreno donde se hallaba una iglesia y una pequeña imprenta.
El atentado del coche bomba sucedió en el estado de Bauchi, al norte de Nigeria, mientras un grupo de personas estaba cerca de la iglesia Living Faith Evangelical. Además de los 15 que murieron otros 33 resultaron heridos.