La Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), expresó su solidaridad con las víctimas de la violencia que sufre el país y reiteraron su compromiso pastoral de trabajar por el bien, ofreciendo "el amor y la salvación que nos entrega Jesucristo".
"Hacemos nuestro el intenso dolor y el atroz sufrimiento que, a lo largo y ancho del país, experimentan muchas personas, familias y migrantes que son víctimas de la violencia, de las extorsiones, de la injusticia, de la corrupción, de la impunidad, del desempleo y la pobreza y, últimamente, de los desastres naturales", expresaron los obispos con ocasión de su 96º Asamblea Plenaria.
"Les decimos, por tanto, que nuestra oración, la predicación de la Palabra de Dios, la celebración de los sacramentos y todo nuestro trabajo pastoral tienen como único objetivo hacer el bien y seguir comprometidos con los mejores anhelos de su corazón. El tesoro y la piedra preciosa que ofrecemos es el amor y la salvación que nos entrega Jesucristo".