La Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) anunció esta semana que, tras la invasión de un templo católico durante una Misa por parte de fuerzas policiales para capturar a un famoso narcotraficante, rezarán para que, bajo el auspicio de María de Guadalupe y del Espíritu Santo, los "narcos" abandonen la violencia.
"Seguimos implorando al Espíritu Santo para que mueva nuestros corazones en estos momentos en los que la zozobra e incertidumbre asolan a nuestro país. Apoyados en nuestra fe, tenemos la firme esperanza en construir un México de paz, justicia y concordia", señaló un comunicado de la CEM.
El mensaje expresa también su "apoyo y solidaridad" con Mons. Miguel Patiño Velázquez, Obispo de Apatzingán, al presbiterio y a toda la feligresía de esta Iglesia Diocesana "que ha venido sufriendo las consecuencias de la violencia a causa del narcotráfico en esa región", destacó.