En una reciente declaración los obispos estadounidenses mostraron preocupación por la anunciada propuesta del Presidente Bush de enviar tropas de la Guardia Nacional a la frontera con México.
El Obispo de San Bernardino y Presidente del Comité para asuntos migratorios de la Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos (USCCB), Mons. Gerald R. Barnes, difundió un comunicado horas antes de que el Presidente Bush se dirigiera a la nación respecto al tema de la inmigración.
Mons. Barnes se mostró favorable a reformar el sistema de inmigraciones, un asunto de prioridad nacional para Bush. “La Iglesia Católica –señaló Mons. Barnes– apoya el derecho de una nación soberana a controlar sus fronteras, sin embargo, como hemos manifestado en ocasiones anteriores, abordar el problema simplemente reforzando las mismas no solucionará el problema de la inmigración ilegal”.