Los obispos de Costa Rica rechazaron los excesos cometidos en el allanamiento judicial a la sede de la Conferencia Episcopal (CECOR) y la Arquidiócesis de San José, para llevarse los documentos sobre los casos del exsacerdote Mauricio Víquez y el P. Manuel Guevara, acusados de abusos sexuales; sin embargo los prelados reiteraron su compromiso en la lucha contra este mal.
"Ni la fiscalía, ni los Tribunales de Justicia, han requerido información alguna a las instancias de la Iglesia, ni a la Curia Metropolitana, ni a la Conferencia Episcopal, hasta lo lamentablemente sucedido el día de hoy", indicaron los obispos en un comunicado emitido el 7 de marzo.