11 de julio de 2008 / 11:56 AM
En un mensaje publicado este jueves, la Conferencia Episcopal de Costa Rica explicó que el respeto de la dignidad a las personas con inclinaciones homosexuales no puede llevar a la legalización de "derechos" que atentan contra la solidez de la familia como célula básica de la sociedad y pidieron a los diputados rechazar un proyecto de ley que pretende equiparar las uniones homosexuales al matrimonio natural.
En el documento, los obispos destacan que la Iglesia Católica "considera que toda persona humana, creada a imagen de Dios, es digna del mayor respeto y rechaza, consecuentemente, toda discriminación contraria a su dignidad. Así, la Iglesia distingue entre el respeto a toda persona independientemente de su orientación sexual y el rechazo al acto sexual homosexual, como acto objetivamente contrario al plan de Dios para el ser humano".
Los obispos advierten además que los políticos "no pueden ni deben legislar contra la recta razón, pues de hacerlo la norma que emiten perdería la fuerza de obligar en conciencia"; y señalan que "las legislaciones favorables a la uniones homosexuales son contrarias a la recta razón porque confieren garantías jurídicas propias de la institución matrimonial a la unión entre personas del mismo sexo. Considerando los valores en juego, el Estado no puede legalizar estas uniones sin faltar al deber de promover y tutelar una institución esencial para el bien común como es el matrimonio".